miércoles, 5 de agosto de 2009

Un pedacito de mi alma...

Un frío día hace 8 años llegué del colegio, recuerdo que mi madre me dijo "anda a ver que hay en el patio"...no me causó mucha impresión su comentario, quizás había un gato o algo así.
Pero me encontré con una agradable y pequeña sorpresita, una bolita de pelos que cuando me vio movió su potito (no tenía colita) y me llamó la atención su orejita negra.
Creo que fue amor a primera vista, pegué un grito de emoción y corrí a tomarla, era tan pequeña y sus ojitos eran como unos cristalitos de un color azul muy hermoso, sí, la amé desde el primer día.
Mi padre no estaba muy convencido de tenerla, ya habíamos tenido experiencias bastante traumáticas con perros, incluso con una que murió en mis brazos y fue uno de los momentos más tristes de mi vida. Pero el show debe continuar y cuando llegó esta pequeña a casa, la pena de las situaciones anteriores comenzó a disiparse.
No sabia como nombrarla, cualquier nombre no era suficiente para esa carita tan hermosa, y un día la vi durmiendo como siempre, con esa panzota que tenía no se movía nunca...y se me ocurrió llamarla Lazy, no muy original, pero la describía muy bien.
Aun recuerdo como lloraba todas las noches, como pidiendo a su mamá, y eran bastante recurrentes las noches en que me levantaba a las 4 am para tomarla en brazos y hacerla dormir...muchas veces me quedé dormida en el patio con mi bebita en mis piernas...luego llegaban las 7:30 y tenia que prepararme para irme al colegio.
Aun recuerdo cuando ni siquiera tenia sus dientecitos, y trataba de morderme los dedos, jaja, era tan agradable, cuando comenzaron a salirle dejó de serlo.
Después su inagotable energía de cachorra, era un trompo incontrolable y le encantaba morder cualquier cosa, un pequeño demonio...pero tanta energía tuvo su precio.
Un día jugueteando salió corriendo de la casa, y un auto la golpeó, aún recuerdo su grito, corrí a verla y estaba en un rincón sin querer que nadie la tocara, me atreví a hacerlo y noté que no estaba bien. El veterinario recomendó hacerla dormir para siempre, pero me opuse con todo, tratamos de buscar la mejor solución y la encontramos, salió caro y fueron días duros, pero mi cachorra salió adelante, aunque una de sus patas tenga un fierro por dentro, es mi perroCop jaja.
La recuperación fue lenta pero satisfactoria, aprendió a jugar al revés, si le tiras la pelota, ella no te la entrega, al contrario, te la tira lejos para que seas tu quien va por ella, es un cielito.
Ha sido mi mejor amiga durante todos estos años, la que me escucha y no me critica, la que cuando me ve triste se acerca y me alegra con sus gracias, aveces simplemente con su compañía. Ella estuvo ahí siempre, aun lo está, es quien me recibe con alegría cada vez que llego a casa, quien me despierta por las mañanas con un besito, quien me reclama por todo y siempre me saca una sonrisa, ella sin duda ha sido la mejor de mis terapias, mi mayor alegría...simplemente es un pedacito de mi alma.
Han sido 8 años de compañía fiel, de momentos hermosos, ella ha sido mi cable a tierra por todo este tiempo...el "detalle" que me alegra la vida, que me da una razón para querer llegar a casa y jugar con ella, hablarle y pedirle que me haga gracias, solo por un poco de cariño, aveces por un pedacito de pan, le encanta jaja.
Pero siempre existe un pero, en este caso es el miedo, el maldito y cochino miedo, tengo pánico de que sus días conmigo terminen. Mucha gente no comprende esto y no le da importancia, al final para ellos un perro es un perro, pero está científicamente comprobado que los perritos tienen sentimientos, por lo tanto, esa gente simplemente no debería tenerlos, un perro es mas que un adorno, más que un simple guardián y más que un elemento social de aceptación, un perro es un amigo, un amigo que no te traiciona y lo daría todo por ti, eso me consta.
Mi perra significa demasiado en mi vida, y me importa un soberano carajo si la gente se burla de eso, si no lo comprende o si lo encuentra absurdo, creo que un alma es mucho más completa cuando aprendes a amar a un animal que no sea humano, los humanos somos los únicos animales asquerosos, envidiosos y dañinos, el resto mantendría un planeta en total equilibrio y armonía, el resto no lo destruye.
Me gustaría saber que las cosas estarán bien, me gustaría que mi niña viviera tantos años como yo, se que es imposible y de verdad es una pena, se que llegará el día en que no la tenga más conmigo y de verdad me aterra cada vez que lo pienso, los días no serian igual, y sin duda la alegría desaparecería por un buen tiempo...
Sólo se que cuando llegue ese día un trozo de mi alma se irá con ella...y con esto solo intento plasmar mi pensamiento y lo que siento, mi narizota de cuero es sin duda alguna lo que más adoro en la vida y si alguien lo cree absurdo, que se cuelgue de la liana de tarzán.
Ahora sólo espero que esto sea solo un sustito...aún hay aventuras que vivir con ella, de eso estoy segura, esta historia tiene muchas páginas en blanco que aún no se escriben.
Al menos eso quiero creer...